La nueva Ley de la Ciencia buscará superar los problemas endémicos de la investigación en España
- Post by: HISCYT
- 21 de abril de 2022
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La Universidad de Salamanca acogió hoy la ‘III Jornada de Política Científica’, centrada en ‘El Proyecto de Ley de la Ciencia’. Organizada por la Unidad de Investigación Consolidada Historia de la Industria y los Sistemas de Ciencia y Tecnología (HISCYT), el Instituto de Estudios Universitario de Estudios de la Ciencia y la Tecnología (eCyT), la Asociación Española para el Avance de la Ciencia (AEAC), la Unidad de Cultura Científica y de la Innovación (UCC+i) y la FECYT, contó con la presencia de Teresa Riesgo, secretaria general de Innovación del Ministerio de Ciencia e Innovación.
Teresa Riesgo destacó que la nueva ley supone una importante mejora para la carrera de los investigadores, en especial, para los que forman parte del Sistema Nacional de Salud. Asimismo, trata de impulsar la transferencia de conocimiento, uno de los aspectos más deben mejorar en el marco de la I+D+i de España. El tercer pilar es la gobernanza, especialmente con el compromiso de dedicar el 1,25% del PIB como aportación pública a la investigación científica, así como otros aspectos relativos a la igualdad de género, la ciencia abierta o la creación de una agencia espacial española.
Aunque la secretaria general de Innovación del Ministerio de Ciencia e Innovación reconoció que la ley anterior, del año 2011, fue un hito importante, era necesario modificarla por diversas cuestiones. Por ejemplo, que “la crisis de 2008 tuvo un impacto negativo para la I+D y expulsó talento por falta de recursos”. Además, la pandemia de covid “ha señalado la necesidad de poner en valor la ciencia y la innovación para la sociedad”, destacó en declaraciones a los medios de comunicación recogidas por DiCYT.
En ese sentido, el nuevo texto, que se encuentra en la fase de negociación de las enmiendas parlamentarias, está especialmente orientada a resolver los problemas sociales. No obstante, para los propios investigadores debería suponer un avance importante con respecto a la precariedad laboral que soportan en la actualidad. “Hay contratos de obra y servicio que se encadenan de manera artificial”, lamentó Riesgo, una situación que tratará de corregirse para ofrecer una mayor estabilidad.
En ese sentido, la futura ley aspira a sentar las bases para atraer talento científico a España. Según adelantó Riesgo, el Ministerio trabaja en un programa para conseguirlo que no solo aspira al retorno de los científicos que han tenido que buscar una salida en el extranjero, sino a contar con otros investigadores de excelencia. Así, los nuevos contratos posdoctorales, como el emblemático Ramón y Cajal, reconocerán los méritos de quienes han desarrollado su carrera en otros países, incluyendo empresas privadas.